Los tendones que realizan la rotación de la articulación del hombro forman una envoltura o manguito que rodea la cabeza del húmero. Al conjunto de estos tendones se les conoce como MANGUITO ROTADOR que está formado por los tendones de los músculos supraespinoso, infraespinoso, redondo menor y subescapular. Estos tendones discurren entre la cabeza humeral y el acromion que es la parte de la escápula, fácilmente palpable, que forma el relieve del hombro. Es en este espacio entre el acromion y la cabeza del húmero por donde los tendones del manguito rotador realizan su excursión para producir el movimiento de la articulación. Una reducción de este espacio puede ser la causa de lesiones de los tendones que constituyen el manguito rotador. Al conjunto de lesiones que se pueden producir en estas circunstancias es lo que se conoce como SÍNDROME SUBACROMIAL.
En el SINDROME SUBACROMIAL podemos encontrar procesos inflamatorios, degenerativos y roturas de los tendones que constituyen el MANGUITO ROTADOR del hombro. Si estas lesiones del MANGUITO ROTADOR no se tratan adecuadamente pueden desencadenar una ARTROSIS DE LA ARTICULACIÓN DEL HOMBRO.
En el diagnóstico de estas lesiones debe participar un especialista en CIRUGÍA ORTOPÉDICA DEL MIEMBRO SUPERIOR que realizará una exploración física de la articulación y valorará las pruebas complementarias necesarias para establecer el diagnóstico e indicar, si fuera preciso, la CIRUGÍA del MANGUITO ROTADOR del HOMBRO o del SINDROME SUBACROMIAL
El tratamiento de estas lesiones se realiza en la inmensa mayoría de los casos mediante una ARTROSCOPIA DE HOMBRO que permitirá realizar el diagnóstico definitivo de la lesión y al mismo tiempo su tratamiento. La ARTROSCOPIA DE HOMBRO consiste en la introducción en la articulación de una cámara de un diámetro aproximado de 4mm a través de una pequeña incisión en la región posterior del hombro. A través de otras 2 o 3 pequeñas incisiones del mismo tamaño que la primera se introduce el instrumental y los implantes necesarios para la reparación de las lesiones.
Tras la cirugía, el paciente deberá llevar el hombro inmovilizado con un cabestrillo durante algunas semanas y posteriormente se someterá a un programa de fisioterapia específico para la rehabilitación de su lesión en el hombro.
En algunas ocasiones en la CIRUGÍA del MANGUITO ROTADOR del HOMBRO no es suficiente con el uso de técnicas artroscópicas y se recurre al empleo de otras técnicas con las TRANSFERENCIAS TENDINOSAS principalmente representadas por la transferencia del dorsal ancho y la del trapecio inferior